Regalos originales para el “Amigo invisible”
Si vives en Toledo o cerca puedes pasar a por el regalo de «Amigo Invisible». Te sorprenderás, le sorprenderá… Te lo aseguramos.
El “Amigo invisible” es un juego que consiste es estrechar amistades o al menos, fomentar la cercanía en nuestros círculos personales o laborales. Algunas ocasiones conocemos bien a la persona que nos toca azarosamente, pero puede darse el caso de que nos toque una persona a la que no conozcamos tanto. Ahí, hay que investigar sigilosamente sobre los gustos de esa persona, o al menos observar más su rutina.
Pero, aunque se conozca mucho o poco a la persona a regalar, lo ideal es que regalemos algo útil y bonito. Independientemente de la situación de cercanía. En Ajá Eureka proponemos que el regalo se vuelva un placer tanto para el que lo recibe como para el que lo planea. Para ello, tenemos infinidad de objetos que además de contar con una belleza sencilla, tienen la funcionalidad y la originalidad que distinguirá el regalo.
Esta vez, el “Amigo invisible” será memorable por regalar algo útil y bonito que reboza sorpresa.
Cuando veas todos los productos de nuestra tienda, seguramente alguno te guiñará el ojo, y te hará decir : “lo encontré”.
Testimonio de Sonia, 37 años.
«Entré a trabajar en esta empresa en marzo de este año. La verdad los primeros meses fueron complicados y duros, pues integrarse a un grupo que ya tenía un ritmo marcado me costó mucho alcanzarles. Al llegar octubre, con el puesto de trabajo asegurado y mi desarrollo profesional en aumento, la integración grupal seguía siendo a niveles básicos. Me temía lo que ocurrió pues el departamento de R.R.H.H. ideó una actividad para integrarnos como equipo en el que el “amigo invisible” fue una de las actividades. Además de que no conocía mucho a la persona que me tocó, me sentía en una situación comprometida pues no quería regalar algo “equivocado”. Gastar mi dinero, quería que fuera un buen motivo. La cifra establecida como media, no era muy alta. Pero no sabía exactamente qué regalar.
Fui a muchos sitios, navegué por internet y cuando ya estaba resignada a comprar cualquier cosa para salir del paso encontré un día paseando por el Casco Histórico de Toledo una tienda llamada Ajá Eureka. No tenía nada que perder así que entré a curiosear como en sus cristales sugería.
Encontré más de una opción probable para regalar a esa persona convencida de que además de que le gustaría lo usaría.
Y así fue, el día de darnos los regalos, el mío fue el más original. La persona que lo recibió estaba muy agradecida y yo aún más, pues sé que regalé algo que era útil y bonito.
Definitivamente “lo encontré”.»